Las regiones subdesarrolladas a menudo se convierten en motivo de proliferación de enfermedades. Si bien es bastante difícil tratar enfermedades con recursos limitados, puede ser igualmente difícil simplemente detectarlas. En un esfuerzo por identificar una enfermedad virulenta en particular, investigadores de Australia del Sur, Texas y Etiopía están utilizando tecnología de impresión 3D para localizar parásitos mortales. Como resultado, han creado un kit de prueba de campo que permite a los médicos diagnosticarlo y tratarlo antes de que se vuelva mortal.
La enfermedad en cuestión es la leishmaniasis. La OMS estima que causa cerca de 1 millón de nuevos casos y 30.000 muertes cada año. Afortunadamente, es curable si los médicos pueden detectarlo temprano, pero existen dificultades para probarlo. En particular, un problema fue el del almacenamiento, ya que requiere un medio de prueba costoso. Los tubos de ensayo para guardar el reactivo son extremadamente frágiles y es difícil poner los microscopios en las manos para ver las muestras. Incluso puede llevar una semana entera obtener los resultados.
Para remediar este problema, el Dr. Gardisa creó un prototipo de tubo de ensayo que requería menos reactivo. El nuevo tubo de ensayo necesitaba 10 microlitros en comparación con los 25 mililitros originales. Incluso podría proporcionar resultados en aproximadamente 3 días. Sin embargo, resultó difícil producir el tubo de ensayo en Addis Abeba, Etiopía. Fue entonces cuando intervino Andrew Nerlinger, director de PandemicTech en Austin .
Combatir enfermedades
Nerlinger luego le presentó el problema a Matt Salier, director del Startup Company Institute de Flinders University en Australia del Sur. Con la ayuda de Raphael García del New Venture Institute en Australia del Sur, el equipo comenzó a trabajar en el prototipo. Con la impresora 3D Stratasys Objet Connex, tomó menos de cuatro meses terminar la pieza.
El paquete terminado costó un total de 5,000 euroes australianos. Como se ve en la imagen de arriba, la impresión constaba de tres partes principales: un cuerpo principal que puede contener el fluido, un corcho en la parte superior para tapar el tubo de cultivo junto con un tapón inferior que se puede quitar para limpiar. Los diseños adicionales mejoraron la claridad para mejorar las inspecciones con microscopio. En consecuencia, viene con un paquete cargado con varios tipos de microscopios para inspección en el campo.
El nuevo kit de prueba de campo hace que la inspección y el diagnóstico sean mucho más rápidos. Tiene el potencial de salvar vidas y curar enfermedades antes de que causen daños exorbitantes. También es un gran ejemplo de cómo una colaboración mundial puede resolver problemas en cuestión de meses. Los beneficios médicos del kit seguramente facilitarán la vida de muchos etíopes, entre otros en todo el mundo.
Imagen destacada cortesía de la Universidad de Flinders.