La tecnología de impresión 3D está entrando lentamente en el mundo de la moda. Grandes marcas como Nike y Adidas están experimentando con la técnica, y artistas como Iris van Herpen la utilizan para intentar llevar las prendas al siguiente nivel. La técnica también atrae a los más jóvenes entre los diseñadores de moda. Una estudiante panameña de Moda y Diseño Textil llamada Nadir Gordon hizo un proyecto en el que le preguntaron cuál pensaba que podría ser el futuro de la moda. Bueno, la impresión 3D es lo que respondió. Luego creó un llamativo traje de baño impreso en 3D.
Gordon se sintió inspirado por gente como Iris van Herpen y Francis Bitonti y también quería hacer algo con la impresión 3D y la moda. La tecnología de impresión 3D permite a los diseñadores crear formas que son difíciles de crear en una forma tradicional de fabricación. Gordon quería crear una prenda con forma de olas que chocan contra la costa. Pero, ¿cómo podría uno crear algo así?
Con un poco de ayuda de un amigo. Gordon acudió a Jonathan Guerra, un experto en impresión 3D de la Ciudad de Panamá, Panamá. Juntos diseñaron el vestido, lo que les llevó menos de un día. Guerra utilizó un modelo de Sketchfab para este trabajo, lo que le ayudó mucho. Dividieron la prenda, que consiste en un material PLA, en 14 partes diferentes y luego las imprimieron en una impresora 3D. Específicamente, Guerra usó una MakerBot Replicator 2 para el trabajo. El tiempo total de impresión fue de 70 a 90 horas. Después de que se imprimieron todas las partes, Guerra fusionó las diferentes partes usando un soldador.
El resultado definitivamente se ve impresionante, pero la gran pregunta es: ¿encaja bien? Le preguntaron a la modelo a quién se puede ver en la imagen. Según ella, la prenda era cómoda de llevar. Sin embargo, algunas de las piezas de la prenda se rompieron porque el material de soldadura aparentemente no era lo suficientemente fuerte. Después de que volvieran a soldar esas partes, se debía usar el vestido. Aunque esta prenda difícil de usar es solo material de pasarela y nunca se usaría en la vida real, su método de producción podría ser un buen marcador para la moda del mañana.
Créditos imágenes: Victor Giner Valverde.