Los microvegetales como los rábanos, el brócoli y la albahaca son componentes cruciales de muchas comidas. Están de moda en los restaurantes elegantes como guarnición e ingrediente. Al ser plantas tan pequeñas, los cultivadores emprendedores están ideando nuevas soluciones que permiten a los chefs cultivarlas en interiores por sí mismos. Una de estas soluciones proviene de un usuario de Hackaday, que proporciona una forma ordenada y ordenada de cultivarlos utilizando una plataforma microgreen impresa en 3D. El equipo permite, no solo una configuración mejor contenida, sino también una mejor germinación de semillas.
La plataforma es una configuración engañosamente simple, que consta de dos partes: una bandeja de semillas y una bandeja de agua debajo. La bandeja de semillas es solo una rejilla cuadrada para albergar las semillas, en este caso el brócoli. Utilizando pequeños agujeros en cada bolsillo cuadrado, también permite drenar el agua.
Los usuarios tendrían que medir el tamaño de las semillas que quieren cultivar para hacer la cuadrícula de manera adecuada, ya que el tamaño de las cuadrículas debe estar justo por debajo del tamaño mínimo de semilla para evitar que las semillas se caigan. Al mismo tiempo, también debería proporcionar un camino para que las raíces crezcan. Luego está la bandeja de agua, que se encuentra justo debajo, que proporciona la hidratación necesaria para el crecimiento de las plantas, al tiempo que permite que las raíces crezcan hacia abajo.
Yendo (Micro) Verde
La plataforma es ideal para cultivar muchos tipos de plantas más pequeñas y adornar elementos que se pueden tener en una maceta pequeña. La diferencia es que esta plataforma microverde impresa en 3D es mucho más organizada, lo que permite un mayor rendimiento que una olla de supermercado estándar. También hace que todo el proceso sea más eficiente ya que la mayoría de estas plantas son bastante delicadas.
El proceso de Ben para hacer su propia plataforma microverde impresa en 3D tiene solo 4 pasos . Mida el tamaño de la semilla, diseñe el contenedor de rejilla en un software de corte, diseñe el contenedor de agua debajo y germine las semillas. Sus recomendaciones también son bastante útiles, citando la necesidad de mejores materiales (PETG en lugar de PLA) y advirtiendo a los usuarios que una impresora menos precisa requerirá más de unos pocos intentos para obtener la impresión correcta.
Con todo, este tipo de trucos minimalistas muestran lo que la impresión 3D puede hacer por la persona promedio. Con un poco de ingenio, puede cultivar sus propios ingredientes alimentarios y ahorrar bastante en las compras.
Imagen destacada cortesía de Ben, recuperada a través de Hackaday.